El viaje de San Isidro a San Carlos de Bariloche en camioneta fue toda una aventura. Manejé más de 1.600 kilómetros, atravesando paisajes cambiantes, los verdes campos bonaerenses, la aridez de la pampa hasta la majestuosidad de los Andes.
El destino era una casa alquilada por Airbnb.com, ubicada en las afueras de la ciudad de San Carlos de Bariloche, con una vista privilegiada al lago Nahuel Huapi.
Durante mi estancia en Bariloche, el verano mostró su cara más fascinante. Subí por el Cerro Llao-Llao, excursiones por largos de agua cristalina y visitas varias al Centro Cívico de la ciudad.
Este viaje me permitió no solo conectar con la naturaleza en su máximo esplendor, sino también descubrir la riqueza cultural y la hospitalidad de esta región. Bariloche en verano es un destino que cautiva los sentidos y deja recuerdos imborrables en el corazón.